lunes, 19 de diciembre de 2011

Marioneta I

Tirada en el suelo, con sus blancas muñecas alzadas, atadas por una cadena de plata. Marioneta de la vida, de cara blanca y nivea capa, de ojos castaños, extraños; frios como una mañana helada, nevada...sus rasgos finos, su mirada ausente, su gesto indiferente, los labios finos, el cuello largo, la ropa negra y la blanca capa...

martes, 29 de noviembre de 2011

Crecer

Pequeña era y mi entendimiento igual de pequeño que mi cuerpo. Sin embargo llegado al punto del dolor y la soledad, mi pequeña y volátil mente entendió perfectamente que me había quedado sola y expuesta a un peligro mayor que el físico. Y de pronto me di cuenta de lo frágil que era.
¿Siempre he sido así de frágil? Me pregunté.
Y me di cuenta de que así era. Así había sido siempre y probablemente lo siguiera siendo a lo largo de mi vida, y decidí que no importaba. Entonces empecé a crecer.
Y crecí, con mente de adulto, fría y calculadora, y con cuerpo de niña, de cara dulce y ojos grande. Y aprendí a ver lo que había detrás de las palabras, aprendí los secretos que ocultan las lágrimas en el borde del ojo, aprendí como era el dolor de las heridas que no sangran, pero duelen; aprendí como vivir viendo detrás de las mentiras, aprendí como vivir mintiendo, aprendí a no mostrar mis verdaderas emociones, aprendí a reirle al mundo y llorarle a la almohada, aprendí a callar, aprendí a responder, aprendí a fingir amor, a fingir desinterés, a perderle aprecio a la vida, a no llorar por los muertos, a seguir viva ante todo.
Y crecí, en un ambiente cada vez más frío y marcado por la soledad.
Y crecí, si, pero no lo suficiente. Aún no aprendí a descubrir todas las mentiras, aun no aprendí a borrar las lágrimas, aún no aprendí a cerrar las heridas que, aunque no sangran, duele; aún no aprendí a vivir con alguien que dice la verdad, aún no aprendí a dejar de mentir, aún no aprendí a quitarme la mascara delante de los que quiero, aún no aprendí como mostrarle al mundo lo que siento, aún no aprendí a hablar, aún no aprendí las respuestas a todas las preguntas, aún no aprendí a amar de verdad, a odiar a nadie, a desear morir y hacerlo, a no recordar a los muertos, a tomar las decisiones correctas.
Y mientras tanto, sigo creciendo.

jueves, 27 de octubre de 2011

Y parece que fue ayer

Que increíble, que maravilloso sentimiento. Ver tu carita en media luna después de varios meses sin saber nada de ella me ha llenado de alegría y vida.
Tus ojillos verdes miran fijamente a la cámara, puedo ver aun en fotografía ese sentimiento que surge en tu interior en ese preciso instante, tu curiosidad tan grande como grande es el mundo y grande es el montón de cosas que te quedan por descubrir reflejada en esos preciosos e inocentes ojos esmeralda. Tienes los ojos de tu mamá.
¿Y que decir del gorrillo que cubre tu cabecita y que potencia aún más si cabe ese aura de inocencia? ¿Qué decir de la expresión de tu cara? ¿Qué decir de tu mirada, de tus gestos, de todos esos pequeños detalles que se me vienen a la cabeza cuando veo la fotografía que me acaban de mandar?
Y parece que fue ayer cuando naciste, con tu cabecita redonda, tus ojos muy abiertos sabiendo que aquí fuera todos esperábamos con gran ilusión tu nacimiento y que, aunque no estuviera ahí, en ese momento me prometí cuidar de ti y mimarte cuando te hicieras mayor y empezaras a enfrentarte al mundo.
Solo con dos años y ese mirar ya tan hechicero, con la serenidad de tu padre y la mirada de tu madre.
Eres un milagro de la naturaleza.

Feliz cumpleaños con atraso.

domingo, 23 de octubre de 2011

Escala en gris

Terminar el día laboral, andar por las calles abarrotadas de vidas y entrar en una casa con olor a desprecio. Andar por un pasillo con color a odio y entrar en tu habitación, un remanso de paz. Un remanso de paz marcado por el odio, la indiferencia, el desprecio, las risas crueles y las palabras destinadas a herir cual manchas en pared.
La habitación, blanca al inicio de mi infancia, se ha ido tiñendo de tonalidades de gris según comprendo que no solo no me va a querer, si no que hay veces que ni siquiera me considera su hija. Odio y desprecio que se reflejan en mi mirada tranquila y, quizás, algo triste.
La niña que fui se disolvió en lágrimas de amargura y soledad, ahora solo queda una sombra de lo que fui, un recuerdo difuso de la inocencia, una lágrima pintada con rimel en la mejilla.
Y no es debido a fuerza o fortaleza, siquiera a valor ni tampoco desesperación. Es el sentimiento de total dolor que sientes al pensar que puede ser que alguien llorase tu muerte.

lunes, 10 de octubre de 2011

Caminar

Camino bajo el neón en una ciudad que me invita a caminar hasta mi camino perder y ya no saber volver.

Cambios

Apoya la mano en el cristal deseando que todo sea como fue o que, al menos, el tiempo se pare y jamás avance más allá del momento en el que soltaron sus manos una noche de viento y lluvia con sabor amargo.
No podría asegurar si habían pasado minutos, horas, días o meses desde aquel momento, pero si que estaba segura de que para ella, en su pequeño e infinito universo, el tiempo se había parado momentáneamente.
Y más tarde volvió a fluir. Mágicamente quizás o tal vez fue obra del destino, que reunió dos almas gemelas...tan dispares, pero iguales; tan distintas y sin embargo tan compatibles.
Y el mundo cambió, tal vez no para el resto del mundo, pero si para ellos dos.

jueves, 6 de octubre de 2011

Amanecer

Amanece. Si, amanece, simplemente sale el sol otro día más. La poca luz que entra por la persiana parece ser la suficiente como para teñir mi pálida piel del color de la sangre.
Me gusta que amanezca. No, no es que me guste el amanecer en si, solo me gusta el echo de que amanezca.
Si, es raro, pero hay veces, cuando la soledad me abruma, que dejo ligeramente abierta la persiana solo para saber que amanece.
Y eso, que amanece. Bueno, ahora no, pero suele hacerlo; quiero decir, suele amanecer. Al menos todos los días una vez al día debería amanecer. Si no, preocupate.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Terapia 1

Despues de desfilar antes la muerte una y otra vez, nada debería darme miedo ya, nada debería causarme dolor. Es ridículo que las personas aterren más que la muerte, pero esa es mi realidad. Es incluso divertido ver como un texto o unas palabras pueden cambiar una vida...y como un lápiz puede salvarla.
En mi vida tengo claro que hay tres cosas que predominan: miedo, odio y tinta. Podría decir que las tres a partes iguales o que la tinta compensa las otras dos...no sé, da igual.
Lo bueno de tomarse la vida con tanta tranquilidad es que puedes ver lo malo como si solo fuera una ilusión y aplazar el sufrimiento hasta un momento en el que lo puedas llevar mejor, y creo que esa es una de las mejores cualidades que te pueden tocar en la vida. Si llevas la vida con prisas todo se magnificara y dolerá hasta la más mísera desgracia...
Bien, dejando filosofías de vida a un lado, hay quien prefiere dejarse caer y hay quien prefiere intentar reflotar...pero eso siguen siendo filosofías de vida, vaya...pues sigamos hablando de filosofías de vida, ¿por qué no? Tampoco es que haya que hacer algo más entretenido que escribir.
Escribir, escribir...escribir es una buena terapia, cura muy rápido y ayuda a cicatrizar. También el amor ayuda...bueno, tacho, el amor no ayuda una mierda. Otra buena terapia es recordar momentos chapichusquis, así que, eso haré.
Dentro de poco será la Feira Franca, ese día hara un año que conozco a Rey Carmesí...o quizas no fuera exactamente ese día, pero queda como esa fecha en general.

Recuerdo de un alma turbulenta

Mira, hace tiempo apostamos, jugamos nuestras cartas y perdimos ambos. Solo quedó soledad y desprecio...y un sentimiento de vacío que ninguno de los dos supo explicar nunca muy bien.
En mi pequeño mundo eramos solo tu y yo, dos entes separados del mundo, distantes de lo rutinario, distantes del mundo...como dos estrellas fugaces destinadas a chocarse, nos encontramos y tu mundo y el mio se fusionaron bajo el cálido dolor que desprendían nuestras heridas...aún recuerdo ese día de vez en cuando.
Tal como llegaste, te fuiste, envuelto en esa aureola de integridad que nunca te abandonó...y tu te reías de mi timidez y mi falta de disposición para hacer las cosas de manera apresurada...formas de ser que marcaron la diferencia. Aquí me tienes, lamentando el pasado mientras tu me observas desde donde quiera que estés, porque no me creo que pueda existir una realidad en la que tu no estés.
Déjame seguir recordando. Mirada arrogante y gesto de superioridad, sonrisa pícara y vocabulario barrio bajero. Sí, así eras tu, nuestro líder, la cabeza de nuestra familia, nuestro punto de unión.
Todo lo que tengo de ti es el recuerdo de un alma turbulenta, de un alma con ganas de guerra, que miraba el mundo con desprecio y se reia de lo que otros admiraban.
Yo te admiraba a ti.
Eramos dos almas gemelas, tan dispares pero iguales, que en algun momento se tenian que encontrar...y separar.

jueves, 15 de septiembre de 2011

Puntadas

Dandole puntadas a mi corazon recuerdo...que no se coser

martes, 13 de septiembre de 2011

Valor. 16 de Julio 2008

Me giro y sonrío a la cámara, aun con sangre brotando de las heridas. Tú me sonríes, haces la foto y vienes a mi lado a curarme y darme ánimos. Más tarde, cuando llegas a casa, escribes con un boli de tinta "Valor. 16 de Julio 2008".
Tres días después fue la primera vez que perdí la voz.
Callada, siempre en silencio, contemplé una y otra vez la ciudad desde aquella ventana...sentada allí pasaban las horas sin que yo lo notara. Lo descuidé todo: mi salud, mi aspecto, mis estudios...pero consegui recomponerme y hablar un poco en los momentos que era necesario. Seguí nuestra regla sin jamás romperla, en un mundo que seguía siendo el mismo que antes de que tu te fueras, pero que era completamente distinto.
Aquella noche, nuestra pequeña familia se miró por última vez. Todos juntos, veintitrés personas alrededor de una lápida, llorando por dentro y sin derramar una lágrima. También fue la última vez que fuimos capaces de vernos como una familia. Sin ti, aquellas caras que tan familiares eran para mi y que tan bien conocía, se me hicieron extrañas. Cambiamos en menos de una noche y en silencio, juntos por última vez y decididos a hacer de esa noche algo inolvidable. Y vaya si lo hicimos.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Colores

Hoy todos los colores tendrán cabida en mi paleta, empezando, por ejemplo, con el blanco. Antes no sabía que hacer con el blanco, pero creo que hoy si se que hacer con él.
Juguemos con los colores. Deja que el rojo de mis labios sea tu cielo azul, que el verde de tu risa sea el rosa de mis mejillas, que el amarillo del sol tiña nuestra piel pálida de naranja...deja también que el morado del atardecer haga de nuestros sueños una hermosa realidad multicolor.
Deja que sean los colores los que gobiernen nuestras vidas y destierra la escala de grises para las letras pequeñas que nos acechan al final del folio...en blanco.

jueves, 11 de agosto de 2011

Despedida

   Me acerco en silencio al lugar donde solía sentarse. Se escucha lejano el tenue tic-tac de un reloj de cuerda y huele a polvo y soledad.
Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que alguien entró en aquella sala y ahora comprendía el por qué. Todo lo que había allí me recordaba su presencia. El viejo piano de cola seguía en su esquina, un recordatorio de la felicidad que habíamos experimentado antes de pasar por aquella locura en la que los dos nos hundimos y por la que nos dejamos llevar.
   Llovía y toda la casa olía a madera mojada, un olor que a mi me desagradaba pero que tu adorabas por recordarte a tu niñez. Al cerrar la puerta de la entrada me recibiste tocando uno de mis vals favoritos, el vals del adiós. Ahora suena a ironía, pero en aquel momento me pareció hermoso y me recordó al día en que me enamoré de tí, un día con olor a lluvia como aquel. Te encontré tocando el piano de la esquina del comedor, con la mirada tranquila y los gestos pausados, esperando mi regreso. Habías preparado la cena y puesto la mesa, una de esas habituales cenas románticas que se dan en la pareja media y que nunca se dieron entre nosotros. Nuestro amor jamás fué un amor adolescente, siempre fué un amor adulto y maduro que evolucionó por el camino correcto, crecimos y nos casamos. El día de nuestra boda fue el más feliz de mi vida.
Ahora suspirar es todo lo que me queda, suspirar y recordar. El vals del adiós fué realmente el inicio de un baile de despedida que acabaría con tu muerte. Y aquí estoy ahora, junto a tu cuerpo, contándote nuestra singular historia de amor desde mi punto de vista.

   Al alzar los ojos veo a unos hombres trajeados de negro y comprendo. Me aparto para permitir que se lleven tu cuerpo para que al fin puedas descansar, pero antes me acerco para susurrarte esas palabras que tu sabes. Los acompaño hasta la puerta y observo como se alejan.
Hasta pronto. Esperame. Te amo.

Aquella vieja jugueteria

Era una ciudad que vivía bajo la magia de los días de lluvia y las primaveras cálidas. Escondida entre pequeñas calles con olor a lluvia se escondía una vieja juguetería, ahora cerrada. Aquel lugar aún recordaba las risas de los niños cuando sus padres les llevaban allí para comprarles juguetes nuevos o peluches por sus cumpleaños.
De todas esas ilusiones solo quedan recuerdos amontonados en un cajón. El viejo artesano ya no construye muñecos para que otros los disfruten, todo lo que queda de esos años es un pequeño muñeco roto que encontró en su día y que jamás arregló. Él te diría que ese muñeco era su vida.
Yo conocí a aquel artesano una tarde lluviosa en mayo.
Corría para refugiarme en algún soportal o café cuando una voz me llamó. Me giré y un anciano me hizo un gesto para que pasara, era una vieja juguetería. En ella se apilaban juguetes en las mesas y pequeños peluches en los cajones, pero el muñeco estaba sobre la mesa, "sentado" en una pequeña silla de madera, justo al lado de donde se sentó el viejo artesano. Conversamos mientras esperaba a que cesara la lluvia y antes de irme me regaló aquel muñeco.
Poco después el artesano murió.
Para él empecé a escribir esta poesía:
Entre calles de piedra y lluvia,
entre edificios se escondía
el lugar que en su tiempo construía
la ilusión de los niños cada día.
El viejo artesano ya no construye
muñecos para que otros los disfruten,
solo quedan herramientas en el estuche
y cajones llenos de viejos peluches.
Su único amigo ahora es
un muñeco roto que encontró una vez
jamás lo arregló y ahí lo ves,
lo acompañó desde su niñez.
El viejo muñeco mira al viejo artesano,
el viejo artesano suspira por aquellos años,
aquellos años jamás regresaron.
Yacen aquí artesano y regalo.

viernes, 15 de julio de 2011

Texto 8

[Los sentimientos crecen, cambian, maduran...pero no desaparecen]

- Este mundo se tiñe de color carmín...ya no se si puedo seguir aguantando una ilusión que es y que al mismo tiempo no es. - Suspiró el muñeco.
-  Ese tipo de contradicciones son las que mueven al mundo.
- ¿Tu crees?
-Lo creo - dijo ella, segura - Si no, ¿por que no deja de llover?
- Sufrimiento, así es como debe ser la vida, como parece.
- Sufrir parece la base de esta vida...si no quieres sufrir, jamás te enamores, pues los mayores sufrimientos en esta vida son la muerte de un ser amado, el sufrimiento de un ser querido y el amor no correspondido.
- Amor..."cantar, reir, llorar, arder, como un campanario en las manos de un loco"...supongo que es la cita que mas se acerca a como me siento ahora.
- Puede ser.
- Será.
- O no.
- Tal vez.
- Lo más seguro es que si crees que será, sea, porque inconscientemente llevarás esa relación a un punto donde ya no podrás avanzar sin dañar a esa persona a la que quieres

lunes, 27 de junio de 2011

Texto 7

- La amas - dijo maravillada ella.
- La amo - dijo maravillado él.
- ¿Te sorprende?
- Me sorprende - asintió - Pues en soledad embarqué, en soledad he estado embarcado y en soledad desembarqué. Mas cuando pisé tierra, de desolado pasé a no estarlo, pues con Soledad estoy y en Soledad me encuentro.
- ¿Siempre solo?
- Más bien, siempre a solas con la soledad.
- Hay otros caminos.
- En Soledad se encuentran.
- Y en Soledad se quedarán si no intentas remediar tu soledad. Podrías ser feliz.
- ¿Qué importa la vida, si la tristeza siempre aplasta la alegría superficial?
- Así pues, seguirás en la oscuridad.
- Aún no he decidido nada.
- Pues decide, muñeco, antes de que el tiempo y el momento te arrebaten lo que deseas, pero por lo que no lucharás.
- No es tan sencillo.
- No es tan complejo.
- Será como dices.
- Como digo es.
- No te lo niego, mas no creo que seas capaz de entender por completo como me siento.
- Será como dices.
- Como digo es.
- Mas tampoco tu acabas de entenderte por completo.
El muñeco calló un instante. Después de pensar miró a la mujer y dijo con tranquilidad, como quien escribe "FIN" al final de un libro:
- Como dices es.

Un cuento


Este es un cuento donde el final triste es el final feliz.
Aquel día dejaste que te llevase afuera para hablar.
Tu creías que te iba a pedir para salir.
Yo sabía que no iba a hacerlo.
Si hubiera sido capaz de hablar habrías oído un
"Te quiero..."
Pero nada más.
Un amor que no esperaba nada.
"Lo siento. Te quiero, pero no como tu me quieres a mi"
Me quedé en silencio mientras seguías hablando.
Palabras sin sentido.
No comprenderías como me sentí en ese momento.
Tampoco yo entendí porque había necesitado tanto oírte decir eso.
Me sentí tranquila.
Me sentí libre.
Me sentí salvaje.
Dentro había algo que dolía.
Pero no me importó.
Era la misma que antes de la muerte de él.
Volvía a ser yo.
Ya no necesitaba gustarte.
Ya no necesitaba buscarte.
Era de nuevo yo.
Pasó la tarde y volví a casa.
Una sola lágrima brotó de mis ojos.
Seis meses que aguanté amándote en silencio se lo merecían.
Pero no fui capaz de estar tan triste como debiera.
Mientras por mi mejilla resbalaba aquella lágrima en mi boca había una sonrisa.
Una sonrisa ya imposible de borrar.
¿Fue un final triste?
¿Fue un final feliz?
Fue un comienzo.
Aunque tu interpretaste mal lo que yo quería decir.
Aunque yo no dije lo que quería decir.
Aunque haya comprobado lo que suponía.
Aunque creas que me hayas hecho daño.
En el fondo, este final triste fue un final feliz.

Pas de deux con la muerte

Rota, destrozada y sin lugar a donde ir.
Mirando el cielo esa noche pensé que me moría y la navaja que apuntaba a mi rostro lo parecía afirmar.
Sonreí.
Que irónico.
Siempre me había reído de los que pensaban que la muerte bailaba siempre conmigo.
"Un último pas de deux con la muerte" Susurré.
Y abrí los ojos.
Agarre el metal y sentí mi sangre correr.
"Ahora"
Y salté adelante.
La sangre tiñó mi brazo de color carmín.
Sangre.
SU sangre.
Corrí y me alejé de alli.
De vuelta a casa.
No hay nada que compre el sentimiento de ganarle a la muerte.
"Nuestro ultimo baile aun puede esperar"

jueves, 10 de marzo de 2011

Texto 6

[La vida es un monologo interior que nunca se llega a dar]

-Y ahí estaba, tirada en el suelo llorando, como la primera vez que la vi - dijo con voz desgarrada el muñeco.
-¿Otra vez ha estado llorando? Será por eso que llueve aquí, a fin de cuentas esta realidad no puede existir sin ella...sin sus suspiros, que son nuestras ráfagas de viento; sin su sonrisa, que es nuestro sol; sin sus lágrimas, que son la lluvia...ultimamente llueve mucho, ¿no crees? - comentó ella con tranquilidad - Por cierto, hace mucho que no hablas de ELLA, ¿tan pronto la olvidaste?
-¿Olvidarla? Eso quisiera yo...pero me ha dejado, y no se que hacer.
-Como ÉL...
-Como él.
-Eso es triste.
-Lo es...¿te importa?
-No, yo vivo de suspiros

lunes, 7 de marzo de 2011

Texto 5

Hace días que no oigo al muñeco...
-Y así, una y otra y otra y otra vez - suspiro cansada, mirando hacia el vacío.
-¿Otra vez triste? - me pregunta esa voz, que tan bien conozco.
-No te quiero aquí, que venga el muñeco - Le digo.
-¡Oh, vamos! ¿Otra vez con lo mismo? El muñeco no va a venir, amor, lo sabes...es tu imaginación que tal muñeco exista.
-Ahora mismo tu también eres mi imaginación...solo ella y los sueños pueden traer a la vida los muertos.
-Si, ¿pero acaso no te gusta este sueño? - Me pregunta mientras se sienta a mi lado.
-Que venga el muñeco.
-¡Que obsesión con el muñeco!
-Si es mi sueño quiero disfrutar de él...vete, ____, nuestro tiempo pasó. Tu te fuiste y yo me quedé a solas con mis deseos.
Se desvaneció entre una polvareda de estrellas.
Y volví a oír al muñeco llamando por mi...

viernes, 18 de febrero de 2011

Saltar sin saber donde vas a caer

Adelante no sabes que hay, atrás solo hay oscuridad.
Reconoceré que la oscuridad me da miedo, de echo me aterra, pero no puedo luchar contra eso.
Ahora lo único que veo es la piedra gris bajo mis pies...y adelante el vacío.
Saltaré, eso seguro, pero...no puedo evitar que me de miedo. 
No me asusta la altura, no, eso jamás. Amo estar en lo alto de un precipicio y asomar mis pies por el, es una de mis pasiones...pero normalmente veo lo que hay debajo de mis pies y aquí no puedo hacerlo.
¿Me agarrarás cuando me lance?
¿Me soltarás?
¿Quitarás tu mano cuando la valla a coger?
¿Cuan alto está esta plataforma en verdad?
No puedo evitar no confiar ni en mi ni en ti. No confío en nadie en estos casos.
Nadie me asegura que me ames, ni que me odies.
No es lo mismo querer que algo sea para ti que no querer que algo sea para otro...
¿Qué es verdad y qué es falso?
Pronto me lanzaré y espero que estés ahí para agarrarme...aunque en el fondo pienso que no estarás, que hay alguien que te importa más que yo...
No volveré atrás, eso seguro...pero no se si quiero avanzar.

viernes, 11 de febrero de 2011

Cielo nocturno

Mira un instante el despejado cielo nocturno.
"Dime que ves."
Te pediré alzando la mirada
"Ahí arriba brillan millones de estrellas."
Me dirás con una sonrisa.
"¿Seguro?"
Preguntaré con un brillo de desconfianza en la mirada
"¿Qué si no?
Será tu comentario a mi pregunta
"El cielo esta formado por sueños y canciones"
Responderé con tranquilidad
"Sueños y canciones dices...¿de dónde sacas eso?"
Comentarás mientras lo intentas razonar
"Cada persona representa un sueño y las canciones son los sueños de las personas"
Diré, intentando que me entiendas
"Entonces...¿el cielo está formado por sueños?"
Razonarás, llegando a la idea que yo queria expresar.
"Si, porque todos tenemos la llama de la esperanza en nuestro interior...y ella convierte cada estrella en un sueño, cada sueño en una canciones y cada cancion en una estrella"
 

Sample text

Sample Text